Mazinger, sobrevivió inmutable físicamente a mi mudanza, así como el armado permanecerá por siempre en mi recuerdo, superando a la pérdida de la mayoría de las fotos del proceso. Moraleja personal: Mazinger puede con todo.
Lo único que me queda por compartir son las 15 mejores fotos que le tomé, celular en mano, a mi pequeño coloso de papel.
Si te gustó... ¡Puede ser tuyo!
Nos reencontramos, en el próximo proyecto.
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