Jueves 29/11/12. 21:00Hs. Teatro Gran Rex. Buenos Aires, Argentina. Rick Wakeman nos visita por sexta vez.
Hace un año Wakeman nos visitaba con un set acústico, con un pequeño coro, orquesta y él, únicamente en piano de cola. Entonces, repasó sus clásicos reversionados en éste formato.
Cuando llegó el turno de presentar algunos extractos de “Viaje al centro de la tierra”, nos adelantó: “Esta obra la compuse en 1974, y si todo va bien, el año que viene vuelvo esta vez con toda la banda, a hacer una versión completa. Esto es, Viaje al centro de la tierra”.
Y la promesa, quedó en el aire.
Basado en la obra de Julio Verne, “Viaje al centro de la tierra” representa la mejor obra completa de éste virtuoso compositor e intérprete. Habiendo visto la luz por allá por el ‘74, como segundo su disco solista, fué inmediatamente un éxito que se convertiría inexorablemente en un fundamental para cualquier coleccionista del género de rock sinfónico o progresivo. El registro en video, a continuación:
Como admirador de dicha obra, cuando me enteré que Rick cumplía su promesa, sentí una gran emoción. Además en lo personal, esa obra de Julio Verne fué el volúmen que me iniciaría en la lectura por placer, un 23 de Julio de 1987. Aún lo conservo. Había cumplido 10 años.
Nunca sentí tanta expectativa. Vivir algo así sería tocar, sentir, un pedacito de historia.
Tras el ingreso al teatro, nos sorprendió una banda soporte local, que por más que busco en la web, no puedo encontrar su nombre. Ni la agencia de prensa en su escueto programa, se dignó a mencionarlos para el recuerdo, pero quizá es un detalle que no es de extrañar, ya que no se mencionan tampoco los nombres del coro ni de la orquesta. Un bochorno.
La banda hace rock nacional muy correctamente, y fueron, con su sonido accesible pero de detalles y arreglos muy cuidados, una grata compañía para amenizar la espera.
Terminado el set, y con un teatro colmado, se acomodaron los músicos para recibir al gran Wakeman, al cual el tiempo sí le pasa, pero no por lo cual, deja de expresar su alegría y su maestría en las teclas. Éste, acomodado en el centro de su pentágono y sin preámbulos, dió inicio a la versión esperada de la obra.
Personalmente dudaba si los textos los leerían en castellano, o el efecto que tendrían sobre el dramatismo que le imprimen a los pasajes narrados. Los mismos fueron narrados por una gran voz local, y a mi juicio, muy correctamente interpretados desde lo actoral, respetando fielmente la escencia de cada pieza.
Las voces era otro punto que me daba miedo, ya que Wakeman históricamente empañó sus grandes creaciones con pésimos vocalistas. Por suerte, el increíble y versátil Ashley Holt, que se puso al mando de todas las líricas masculinas, dejó todo en las tablas y no solo estuvo a la altura de cada estrofa, sino que superó con creces hasta la mas optimista de las expectativas. Un verdadero grande. La local Cecilia Barba estuvo muy bien también, incluso, teniendo a su cargo dos composiciones nuevas, estrenadas para la ocasión.
Claro, es que Journey originalmente duraba unos 40 minutos. No sólo se agregaron dos partes nuevas, muy correctas y a tono con la obra, sino que además, hubo climas mas profundos y solos mas desarrollados. La versión aproximadamente estuvo en el orden de los 60 minutos, en donde no paramos de emocionarnos y de vivir la aventura, en un marco de perfecta acústica y excelente iluminación para cada momento.
Orquesta y coro, dirigidos nuevamente por Guy Protheroe, impecables. La banda, conformada por Nick Beggs en bajo y stick, Dave Colquhoun en guitarra y Tony Fernández en batería se lució magistralmente demostrando gran solidez y carisma. Al finalizar la parte principal del show, hubo bises reiterando las dos partes mas clásicas de la obra, pero, en una versión mas rockera y con solos mas extendidos. Todos demostraron gran maestría y su total agradecimiento al público.
¿Y Wakeman? Impecable. ¿Que se puede agregar? Un mostruo que te agarra un Casio y le saca humo. Para llorar.
De lo único que nos quedamos con ganas, fué de más. Pensamos que salía una tercera vez, pero no. Me hubiera gustado verlo cerrar el show con Merlin el mago, aunque sea a él solo, pero bueno, ésto se trataba de Viaje, y nada más.
Veremos que depara el destino en lo musical. No vislumbro visitas que me conmuevan, pero quién sabe, en una de esas en 2013, algún monstruo se apiade y venga a traernos alguna alegría.
Les dejo los fragmentos de apertura y cierre de la obra principal. La calidad es bastante pobre, pero, permite tener una idea de lo que fué:
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