El problema de estas aéreas es que fuerzan al máximo el límite de los dispositivos usados. Si te quejas de que tu lente zoom produce algo de distorsión, imagínate los problemas que te puedes encontrar con lentes que no amplían 10 veces, sino 100 o 1.000 veces aquello que ves. Uno de los problemas principales de estas aéreas es la refracción.
Todo medio a través del cual la luz viaja tiene un índice de refracción. Al atravesar el aire, el agua u otro material, la luz sufre una pequeña desviación lo que, dependiendo del ángulo, hace que aumente este índice. El ejemplo más sencillo para comprender la acción de la refracción es colocar una cuchara en un vaso con agua. Si miras este vaso, verás que la línea de la cuchara no continua de manera constante, sino que al pasar el agua esta parece desplazarse hacia un costado, en un ángulo distinto. Este es el efecto de la refracción de luz en el agua.
Las lentes médicas o científicas tienen una cierta refracción, debido a que deben atravesar varios cristales antes de llegar al sensor. Estas desviaciones involuntarias hacen que ciertos detalles a nivel molecular se pierdan, ciertas informaciones no puedan ser alcanzadas por que la luz desviada no llega correctamente.
Esta lente perfecta aun no está entre nosotros, pero los pronósticos más optimistas lo ubican en un plazo de 5 a 10 años, cuando ya sería implementada en el mercado masivo. A nivel consumidor casual una lente perfecta tendría pocas aplicaciones, pero a nivel profesional significaría acutancias mucho mayores a cualquier apertura, además de un segmento científico y biológico más que agradecidos, ya que una tecnología así permitiría resolver y fotografiar organismos a nivel celular.
Foto: 1banaan
Fuente: http://altfoto.com/2013/08/una-lente-perfecta-es-posible-desviando-la-luz-de-manera-incorrecta
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