Hay que recurrir a la tópica forma del lenguaje pero así es: suena raro pero funciona. Estos auriculares no cuentan con el habitual pequeño altavoz que de alguna manera termina alojado en el conducto auditivo o situado frente a él. En su lugar, y para dejar libre dicho conducto y permitir que el usuario no quede peligrosamente aislado del exterior transmiten el sonido a través del propio pabellón auditivo al quedar ubicada una pieza especial en la parte posterior del mismo. A continuación te mostramos un vídeo del funcionamiento de estos peculiares auriculares.
“Abre tus oídos” es el lema con el que se da a conocer Sound Band, un sistema de sonido portátil que carece de altavoces con los que producir el sonido pero que a cambio de no obstruir el canal auditivo permite seguir disfrutando de nuestra música favorita mediante la transducción cartilaginosa que se produce al vibrar unas piezas ubicadas en la parte posterior del pabellón auditivo del usuario.
Al estilo de ese tipo de auriculares que quedan sujetos por la parte posterior de la oreja, Sound Band tiene su parte fuerte en lo que en esos casos sería simplemente el soporte del auricular. Gracias a las vibraciones de esa pieza (en esencia todos los sonidos se producen por vibración de membranas de distinto tipo en altavoces y auriculares) nuestros oídos captan la música transmitiéndola a nuestro sistema auditivo pero además se cuenta con un factor adicional que agradecerán quienes nos rodean: el sonido sólo lo escucha el usuario, no las personas de su entorno. Todos hemos sufrido en alguna ocasión la invasión sonora de alguien cercano cuyos auriculares dejan escapar música a un volumen más alto de lo que parece razonable para el bienestar de martillo, yunque, tímpano, estribo y resto del equipo. Todo esto pasa a la Historia con Sound Band. Las vibraciones se transmiten a la parte posterior del pabellón auditivo del usuario y son inaudibles para las personas cercanas.
Se conectan a cualquier dispositivo mediante Bluetooth y además pueden servir también como manos libres para el móvil al contar con dos micrófonos omnidireccionales que incluyen tecnología de cancelación de ruidos y ecos para transmitir la voz con toda claridad. Para controlar las distintas funciones (subir y bajar volumen, activar la llamada…) se cuenta con una unidad de control que se une a ambos auriculares mediante un cable, quedando situada en la parte posterior de la cabeza del usuario, a la altura de la nuca, en lo que quizá sería la única pega que podríamos ponerle a Sound Band puesto que puede obligar a movimientos algo incómodos para manejar dichos controles.
vINQulo: Sound Band
Fuente: http://www.theinquirer.es/2013/08/13/sound-band-los-auriculares-sin-altavoces.html