Por supuesto, hay truco, pero es uno realmente bueno. La aplicación se nutre de varias librerías masivas que almacenan objetos tridimensionales para aplicaciones de diseño o animación. Lo que hace el programa es seleccionar el objeto más parecido al que vamos a mover (a ser posible uno exacto) y ajustar automáticamente las texturas, temperatura de color o iluminación para que encajen perfectamente en la fotografía cuando lo movamos.
En otras palabras, que no podemos manipular a nuestra suegra para darle la vuelta en esa foto de la playa, solo a los objetos que podamos encontrar en esas bases de datos. Con todo, la limpieza y fluidez con la que trabaja estos objetos es realmente espectacular.
Los responsables del proyecto han publicado un estudio en el que explican con mucho detalle cómo funciona la herramienta (fórmulas matemáticas y algoritmos incluidos). Lo mejor de este software es que, aunque aún está en fase beta, es completamente gratuito. Podéis descargarlo en esta página junto a un puñado de modelos 3D para comenzar a experimentar. También es posible descargar el código fuente del software. Os dejamos con un vídeo sobre su funcionamiento. [Motherboard vía CMU]
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