El año pasado tuve la suerte de ser invitado a recorrer la Casa Rosada, poco antes que se reanudaran las visitas guiadas, como parte de una acción de prensa de la institución, justamente, para difundir esta noticia. Y fue sinceramente, todo un privilegio haber podido disfrutar la visita con un número reducido de participantes, y algo de tiempo extra para las fotos.
Para los extranjeros que llegan a este rincón del ciberespacio: La Casa Rosada es la sede del Poder Ejecutivo de la República Argentina. Dentro de la misma se encuentra el despacho del presidente de la Nación Argentina.
El edificio se localiza en la calle Balcarce 50, en la Ciudad de Buenos Aires, frente a la histórica Plaza de Mayo. Su color característico es rosado y es considerado uno de los edificios más emblemáticos de Buenos Aires. Alberga además el Museo de la Casa de Gobierno, con objetos relacionados con los presidentes del país. En 1942 fue declarada Monumento Histórico Nacional.
Según la tradición, el color rosado se debe al deseo de Sarmiento de representar simbólicamente la fusión de los partidos que protagonizaron las cruentas guerras civiles de la primera mitad del siglo XIX, con la mezcla del blanco supuestamente usado por los unitarios y el rojo de los federales. La leyenda, sin embargo, parece improbable: los unitarios se identificaban generalmente con el color celeste. Por otra parte el color rosa era muy utilizado durante el siglo XIX. Surge de la combinación de pintura a la cal con sangre bovina, empleándose esta última por sus propiedades hidrófugas y fijadoras.
Cada rincón tiene detalles increíbles y no puedo más que recomendar realizar este paseo, que muchas veces por tenerlo muy a la mano, se termina posponiendo en función de otras salidas.
La casa es enorme, y uno termina de tomar consciencia de lo grande que realmente es, obviamente recorriéndola. Desde afuera es un palacio, si, pero por lo menos en lo personal, no me parecía tan grande y con tanto para visitar.
En la recorrida se recorren gran parte de los puntos principales: Pasillos, escaleras, salones, patios y despachos, y si bien creo que no es ni la mitad del edificio, este circuito vale por si mismo la experiencia.
En el sitio oficial puede hacerse la reserva para visitarla gratuitamente, y aunque únicamente puede recorrerse los fines de semana y feriados de 10 a 18, hay un mail para escribir y coordinar visitas en los días de semana.
Con ustedes, el álbum que resume esta hermosa experiencia: