La plaza principal de la capital salteña es la 9 de Julio, corazón del centro cívico.
Otras plazas cercanas que vale la pena conocer, y que particularmente me gustaron mucho, son la Plaza Belgrano, la Plaza Gral. Don Martín Miguel de Güemes, y la Plaza de Tribunales.
Son de destacar también los parques 20 de Febrero, y el hermoso Parque San Martín, el cual tiene una serie de granes plazas consecutivas, con ferias artesanales y de comidas, además de un lago artificial, y el acceso al teleférico de subida al Cerro San Bernardo.
Intercalados en el trazado, encontramos también algunos boulevards y peatonales, espacios siempre bienvenidos para peregrinos como el que escribe.
Salta además cuenta con 5 estadios y 1 anfiteatro a cielo abierto.
El valle de Lerma, donde se encuentra la ciudad, goza de clima templado, con gran pluviosidad entre diciembre y febrero (promedio anual de 754,7 mm). A pesar de la creación de embalses masivos en la región donde se ha notado un importante aumento en la humedad del aire, no existe el más mínimo atisbo de aumento de las temperaturas; al contrario, las máximas temperaturas de la región son de las décadas de 1900 a 1940. En cambio, en el interior de las urbes salteñas, se han generado "oasis artificiales" debido a la isla de calor, producto de la urbanización. Entre el 16 y el 18 de julio de 2010, tuvo lugar la mayor nevada ocurrida en la historia de Salta desde 1582, con temperaturas mínimas de hasta -7 °C y máximas que no superaban los 0 °C.
La semana que viene, cierro la visita a esta ciudad, con el Cerro San Bernardo como protagonista, y, las vistas nocturnas de la capital…
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